LAS RECETAS DE ARANTZA.
Hace unas semanas realizamos la tradicional comida de socios en el txoko de la Peña Los Dedócratas de Cádiz. El plato estrella lo constituyeron unas excelentes Pochas a la Navarra, pochas recién traídas de Tudela que, desgraciadamente, no podremos disfrutar hasta el próximo verano, dado el corto periodo de producción.

La pocha es una variedad de alubia típica de Navarra, aunque también se recolecta en el País Vasco o en la Rioja. A medio camino entre legumbre y verdura, las alubias pochas se diferencian del resto de alubias en que son recolectadas antes de su maduración, y de esa manera aportan mayor ternura. De ahí viene su color pálido, «pocho». Pero su temporada es muy corta, y fresca sólo se puede comprar desde mediados de julio hasta la mitad de septiembre. Aguantan muy bien si las congelamos, y también las encontramos fuera de temporada envasadas en conserva. Tienen un sabor más fino que las alubias, tienen menos piel y resultan menos harinosas.

Las pochas en sus vainas.

El amigo Jesús nos envío 10 Kg (no en vano nos juntamos 25 socios/as) de pochas en vaina, desde su empresa tudelana de Freshnavarra y, a decir verdad, eran excelentes. Las preparamos «a la navarra«, añadiéndole un leve toque personal. Vamos con la receta:

Ingredientes: para 4 personas

2 Kg de pochas en vaina (aprox. 1 Kg sin vaina)
1 cebolla
2 pimientos verdes pequeños o uno grande.
2 tomates maduros pequeños o uno grande
1 cabeza de ajos
Opcional 1 zanahoria
Sal y AOVE

Pochas frescas.

Manos a la obra:

Comenzamos por desgranar las pochas. Las alubias en fresco vienen en vainas y hay que extraerlas cuidadosamente. Conviene tener en cuenta que su peso queda reducido a la mitad al quitarles las vainas y, a diferencia de las alubias en seco, no es necesario remojarlas en agua previamente.

La extracción de las pochas de sus vainas.

En una olla ponemos las pochas, los dos tomates enteros, los dos pimientos verdes enteros sin las simientes y rabos, la cebolla pelada, también entera y la cabeza de ajos. No recomendamos añadir «sacramentos», pues anulan su verdadero sabor. Añadimos agua fría hasta cubrir las pochas y ponemos al fuego. Cuando comienzan a hervir bajamos la intensidad y dejamos cocer a fuego lento durante aproximadamente 40 minutos.

La verdura que acompaña.

Cociendo las pochas.

Sacamos la verdura de la olla y la trituramos en un pasapuré, para a continuación volver a verter esta verdura pasada en la olla de las pochas; añadimos sal y aceite y volvemos a cocer a fuego lento durante otros 20 minutos aproximadamente. Los tiempos pueden variar ligeramente en función de la variedad de pocha y la intensidad del fuego empleado. Se recomienda subir ligeramente el fuego en la parte final de la cocción para espesar la salsa.

Continúa la cocción con las verduras trituradas.

Las pochas en su punto.

Ya solo queda emplatar, y acompañar de un buen pan de telera de la sierra y un buen vino tinto de las tierras de Cádiz.

Nota: también podemos acompañarlas de una guindillas verdes frescas, otro producto de temporada (o en su defecto en vinagre).

Y al plato.

Buen provecho. On egin.

Arantza González Obra bajo licencia Creative Commons

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