El pasado domingo, a una hora tan poco taurina como tabernaria, un buen grupo de amantes del buen vino y la literatura tuvimos el placer de disfrutar de ambos en la nunca suficientemente querida Taberna La Manzanilla de la calle Feduchy de Cádiz. “El Tonel de Amontillado” de Allan Poe, unas copitas de buen vino y una tertulia entre amigos.

Miguel García y su hijo Pepe son taberneros de raza y apasionados de su oficio, que no es otro que la crianza y venta de las mejores manzanillas y amontillados de Sanlúcar. Ahora han ampliado la oferta de vinos instalando nuevas botas en un local anexo, que harán las delicias de los amantes del vermout o del Palo Cortado. Con ese motivo y con el objeto de presentar la temporada de actividades culturales en la taberna, invitaron a sus amigos y clientes habituales a un acto en el que tuvimos ocasión de escuchar una interesante conferencia de José Luis Jiménez García en torno al cuento de Edgar Allan Poe, “El Tonel de Amontillado” (The Cask of Amontillado), el presumible origen del cuento del extraordinario escritor bostoniano y la resonancia posterior del mismo en el teatro, la música y otras artes.

José Luis Jiménez durante su charla sobre Allan Poe

Un bello cuento con el vino amontillado como protagonista, que Poe utiliza como reclamo para una venganza memorable. Los arcos y la bodega de la taberna se transformaron por unas horas en la cripta de los Montresors y una copita del rico amontillado de Pepe, además de tabernero un gran connaisseur de los mejores vinos, como Fortunato, terminó de ubicarnos en el escenario de la cruel venganza. Una degustación de sus nuevos productos puso colofón a una mañana entre amigos, el buen vino y la mejor literatura.

El Tonel de Amontillado

Taberna La Manzanilla de Cádiz

Antxón Urrestarazu Echániz

Obra bajo licencia Creative Commons

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