Este fin de semana cerramos la temporada de monte con una fiesta campestre en Tavizna, algo que se va convirtiendo en una bonita tradición. Bajo el lema «baño, gambas y cava», nos juntamos un buen grupo de amigos/as de Euskádiz, a los que nos une la afición por la naturaleza.

Esta temporada 2018/2019 ha sido muy intensa en excursiones montañeras, tanto por la Sierra de Grazalema como por el Parque de Los Alcornocales. Incluso hemos podido hacer escapadas a otras sierras cercanas como Sierra Bermeja y Sierra de las Nieves en Málaga, Sierra Nevada en Granada, o la Subbética en Córdoba. La llegada del calor nos servirá para hacer un descanso y disfrutar de las muchas playas atractivas de nuestra costa gaditana.

Para cerrar la temporada, y siguiendo con la tradición, este fin de semana nos reunimos un buen grupo de Euskádiz para festejar este intenso año montañero. Y volvimos a uno de nuestros lugares fetiche: Tavizna, una aldea de la sierra gaditana, entre Benaocaz, Ubrique y El Bosque. El río Tavizna nace de la confluencia de dos bellos arroyos: el Garganta del Boyar y el Pajaruco.

Partiendo del precioso valle donde nace el Hondón, recorrimos el arroyo Pajaruco hasta el viejo y bello puente de piedra que lo cruza, donde realizamos el «hamaiketako». Y desde allí, en ligera subida, hasta el arroyo Garganta del Boyar y sus preciosas cascadas y pozas. Es la ocasión para disfrutar de unos refrescantes chapuzones, antes de acometer el festín de celebración, donde nunca faltan para la ocasión, las gambas, el buen jamón y el cava. Acabada la jornada, seguimos por el río Tavizna hasta el pontón existente aguas abajo, finalizando en la ventita de Paco, donde pudimos comentar las anécdotas de la jornada.

Os dejamos el reportaje fotográfico de nuestra divertida fiesta campestre en Tavizna.

Fotos de Jesús Oliden.
Antxón Urrestarazu Echániz
Obra bajo licencia Creative Commons